“Mi cuerpo es mío, yo decido” Evitar el abuso

04 de Marzo de 2015

Tras estar en unas semanas en las que se ha hablado de este tema por el llamativo caso de Ciudad Lineal y otros muchos casos que se van conociendo y que por desgracia no desaparecen, hoy quería hablaros del ABUSO.

Hay varios tipos de abuso y se clasifican en abuso físico, sexual y emocional. Me voy a centrar en el abuso sexual aunque pretendo dar pautas para que los pequeños no sean tan vulnerables y de esa manera podamos evitar cualquier tipo de abuso.

Normalmente, esos abusos son producidos por alguien muy cercano al entorno del menor, utilizan esa confianza, cercanía, familiaridad que la víctima pueda tener hacia su agresor para llevar a cabo su intención. Las niñas son más abusadas que los niños y la edad más frecuente de las víctimas está ente los 8 y los 12 años.

Los niños que tienen más riesgo en esta situación son niños con discapacidad, niños que ya han sido víctimas de maltrato, niños con familias desestructuradas, que tienen falta de afecto, niños muy vulnerables por su corta edad, etc. En definitiva cualquier menor puede ser abusado. En la página de la guardia civil podemos leer características que los adultos podemos observar en los menores y poder detectar estos casos.

En la actualidad hay un porcentaje muy elevado de personas que han sido abusadas en algún momento, a lo largo de su vida, se cree que 1 de cada 4 personas han vivido una situación de este tipo en España. Estamos ante un problema psicológico y social muy importante y que tenemos que aprender a proteger a los menores.

¿Cómo proteger a un menor de estas situaciones? ¿Cómo prevenir?

La familia debe crear un ambiente en el que la confianza sea protagonista, de esta manera tiene libertad el menor para contar cualquier preocupación.

Debemos evitar el castigo físico, de esta manera daremos valor a su cuerpo. Si un niño es agredido en casa, generaliza esta acción y puede dar normalidad a ser agredido fuera de casa. Por otro lado, si se le agrede también puede aprender que esa manera es una forma comunicarse.
Es muy importante enseñar a los niños desde que son muy pequeños, que su cuerpo es suyo y él es el que decide quien lo toca. Vivimos en una cultura en la que es normal abrazarse, besarse y en muchas ocasiones y creo que a todos nos ha podido pasar, estar en una situación en la que obligamos a un niño a que nos dé un beso y la mamá le anima, “venga da un beso a mi amiga”. Esto no debemos hacerlo, no debemos forzar a que ellos hagan algo que no quieren, que no les apetece. El beso, para ellos tiene mucho valor y solo se lo tienen que dar a quien ellos quieren.

Poco a poco debemos enseñarles que tipos de caricias hay, que partes del cuerpo son íntimas, y eso con un simple bañador se puede explicar.
Debemos enseñarles que hay cosas que deben contar aunque sean un secreto, si ellos sienten que está produciendo malestar a él o al que le cuente el secreto, contárselo a un adulto (mamá, papá, abuelos, profesores) es un acierto.

Otro aspecto importante y que hay que enseñar a todos los niños es que no deben acercarse a extraños, no abrir la puerta a nadie que no conoce aunque esa persona les diga que conoce a sus padres, no deben aceptar regalos de extraños por mucho que les guste. Tienen que saber que los adultos no siempre son buenos.

Si seguimos estas pautas y el sentido común, haremos que nuestros pequeños sean menos vulnerables y podremos evitar que sufran estas situaciones. En caso contrario, si sucede, debemos observar a los niños y ponerlos cuanto antes en manos de un especialista.

María Espigares de Silóniz | Psicóloga y Psicoterapéuta Gestalt en Madrid

m.espigares@psicologiamentae.com